×
Compartir en:

El reciclaje es el proceso mediante el cual los residuos se convierten en nuevos productos o en recursos materiales para fabricar otros productos, siendo clave su separación, disposición y posterior valorización. Al basarse en el principio de que el reciclaje debe funcionar en la práctica y a escala, la definición requiere de todo el sistema para que funcione: elección de materiales, diseño de envases, proceso de fabricación, forma más probable de uso, eliminación y recolección del embalaje, disponibilidad, compatibilidad y desempeño de la infraestructura para recolección, clasificación y reciclaje.

¿Por qué es tan importante potenciar procesos como el reciclaje?

 

El estudio “Breaking the Plastic Wave”(2020), desarrollado por Pew Charitable Trust y SYSTEMIQ y la colaboración de Ellen MacArthur Foundation entre otras entidades, estima que a nivel mundial 11 millones de toneladas métricas de desechos plásticos ingresan al océano cada año. Sin una acción inmediata y sostenida, esa cantidad se podría triplicar para el 2040, llegando a 29 millones de toneladas métricas por año.

Esto ha generado que la contaminación plástica tenga efectos negativos sobre la biodiversidad y potencie una crisis climática, económica y de salud pública, donde la preocupación por abordar y frenar esta problemática mundial ha comenzado a ocupar un lugar preponderante en los gobiernos, ONG´s y ciudadanía en general.

A nivel global, solo un 14% de los envases y embalajes plásticos se recicla. Y a nivel nacional, esta cifra es aún más baja, donde solo un 8% de envases y embalajes efectivamente se recicla. (Asipla (2020). Estadísticas industria del plástico, informe 2019.)

Frente a este contexto la Economía Circular de los Plásticos, dónde el reciclaje es uno de los pilares, se posiciona como una solución sostenible que genera beneficios ambientales, económicos y sociales. Bajo este sistema el plástico nunca se debe convertir en desperdicio, sino más bien en un recurso valioso que puede tener muchas vidas, y que tiene la capacidad de reducir en casi un 80% el flujo anual de desechos plásticos en el océano para el año 2040.

¿Cuáles son los Beneficios de Reciclar?

 

 Los beneficios de reciclar son múltiples, algunos de ellos:

  • Preservación de recursos naturales: por cada envase de plástico reciclado, se evitan los métodos de extracción de recursos naturales vírgenes, que son invasivos y contaminantes.
  • Disminución de la contaminación: al reciclar se disminuye a cantidad de residuos plásticos que terminan en vertederos y/o en el océano reduciendo considerablemente el daño producido y alargando la vida útil de estos ecosistemas.
  • Ahorro de energía: la fabricación a partir de envases reciclados supone un gran ahorro energético en comparación a la fabricación a partir de materiales vírgenes.
  • Reducción de la emisión de gases de efecto invernadero: se evita considerablemente la emisión de toneladas de CO2.

 

¿Cómo reciclar correctamente los envases y embalajes?

 

En primer lugar, para reciclar correctamente es muy importante consumir de manera consiente y responsable, para esto se debe:

 1) Preferir productos reciclables:

  • A la hora de comprar productos, preferir aquellos formatos que conlleven un menor uso de plástico.
  • Identificar si el producto tiene el símbolo mundial de reciclaje, que va de la clasificación 1 al 7. Ésta simbología es de carácter voluntario, por lo que puede que algunos envases no lo tengan.
  • En el caso de los plásticos, la reciclabilidad de los envases se puede identificar revisando el número de resina del que está compuesto, ubicado comúnmente en la parte inferior de éste.
  • Las resinas con mayor tasa de reciclaje son PET-1, PEAD-2 y PP-5. Los números 7 son los “otros”, resinas más complejas o mezclas de resinas difíciles de reciclar.
  • Se deben preferir envases con clasificación 1, 2 y 5 y evitar 6 y especialmente los números 3 y 7.

 2) Limpiar bien los envases y embalajes post-uso: 

  • Luego de haber utilizado los productos, es fundamental limpiar correctamente los envases. Para esto se recomiendo rociarlos con agua con cloro o con alcohol, por todos lados, antes de dejarlos. Además, evitar que estos vengan con residuos orgánicos o líquidos, ya que dificulta el reciclaje. Éstos deben estar limpios y secos.
  • Procura limpiar la totalidad del envase sin utilizar productos y agua en exceso

3) Compactar bien los residuos:

  • Compacta los envases de la manera que te sea más sencilla. Las botellas se pueden apretar para deformar y expulsar el aire. Las latas se recomienda aplastarlas.

4) Separarlos de manera correcta:

  • Entregar los envases separados por materialidad.
  • En cuanto a los envases plásticos estos se pueden identificar por la rotulación o categorización destacada anteriormente.
  • Disponer distintas bolsas/basureros/cajas y agrupar en la misma casa según material, para facilitar la tarea a la hora de ir a un punto limpio o de que sean retirados.
  • Se recomienda al consumidor confirmar con la página de su municipalidad, para los tipos de productos que se reciben en cada punto específico, antes de ir a dejar los residuos.
  • Se debe tener un cuidado especial con qué elementos estamos depositando junto con los residuos reciclables. Se ha visto de manera reiterada la presencia de guantes de látex o similares entre los residuos desechables. Cualquier equipo sanitario desechable debe ser desechado con los no reciclables.