Dos de los desafíos clave que se deben abordar para que la industria de los plásticos avance hacia un modelo circular, son el diseño de los productos y el desarrollo del mercado para el material reciclado. El diseño de los envases determina cuán fáciles o difíciles son de reciclar cuando llegan a las plantas valorizadoras. Por otro lado, si no hay demanda para el material plástico reciclado, tampoco va a incentivarse la cadena logística de valorización. 

Con más de 40 años de experiencia, la empresa valorizadora Comberplast enfrenta estos dos desafíos con soluciones innovadoras y concretas. 

En cuanto al primer desafío, dentro de los envases plásticos actualmente considerados problemáticos están los multicapas. Estos suelen estar compuestos de láminas de distintos tipos de plásticos que en conjunto logran ciertas propiedades deseadas para el envase, pero que al final de su vida útil no son reciclables. 

Es así como la compañía está abordando este desafío desde dos aristas. En primer lugar, está realizando un levantamiento de información que busca trabajar junto a las distintas empresas productoras para establecer cuáles son los productos en donde se está utilizando multicapa sin ser necesario. Por otro lado la empresa valorizadora ha desarrollado tecnología y procesos para poder reciclar ciertos tipos de multicapa, permitiendo reciclar multicapas compuestos por distintos porcentajes de poliéster, poliamidas (PE y PP).  

De esta manera Comberplast está avanzando en la disminución de plásticos problemáticos abriendo el abanico de lo que hoy se considera reciclable, invitando a la industria y a los consumidores a replantearse qué debería ser considerado como plástico N°7-Otros y cambiando el pensamiento de que todos los multicapas de distintas materialidades no son reciclables. 

En cuanto al segundo desafío, Comberplast está colaborando con empresas transformadoras de envases para incorporar material reciclado en los que no estén en contacto con alimentos, además de potenciar el desarrollo de un mercado para estos materiales generando productos de material reciclado utilizados en otras industrias. 

Tal es el caso de contenedores y pallets para la industria logística, cajas de empalme para medidores eléctricos, cubiertas vegetales para el sector de agricultura, e incluso algunos artículos para el hogar como contenedores para reciclaje que venden en retail. También están incursionando en otras industrias tales como, construcción, minería, pesca, entre otros.

Este desafío ha enfocado además el trabajo de la compañía en la incorporación de tecnología de RFID (identificación por radiofrecuencias) en algunos de sus productos. Esto debido a que permite recolectar información de los distintos productos con material reciclado que vuelven a sus instalaciones para poder aplicar una mejora constante en la producción de los mismos. Adicionalmente, esta tecnología y la información que recolecta, le brindan un valor adicional a los productos compuestos de plástico reciclado haciéndolos más competitivos en el mercado.