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Cada uno de nosotros producimos basura a diario al abrir un paquete de comida, desechar ropa, botar bolsas de plástico, etcétera. Pero ¿De qué manera podemos reducir nuestros desechos?

Nota publicada en La Tercera, el 17/04/2022

Todas y todos tenemos la responsabilidad de hacernos cargo de lo que desechamos, pues esa basura es dañina para el medio ambiente y, por ende, para todos. Es por eso que cada acción que ayude a reducir los residuos o transformarlos, será un aporte significativo. Para esto, se han promovido actos que cada uno de nosotros puede realizar, como lo es la «Regla de las 3 R», que impulsa acciones diarias.

«Hoy la ciudadanía juega un rol clave en las acciones que se puedan impulsar y generar para mitigar las consecuencias del cambio climático a través de la adquisición de nuevos hábitos. Hace algunos años se hablaba de las 3R (reducir, reutilizar y reciclar), pero hoy y como una manera de concientizar a la ciudadanía sobre su rol en el cuidado del medioambiente y el impacto que tienen sus acciones, se han ido incorporando otros elementos a la ecuación, tales como reflexionar, rediseñar, reparar y recuperar. Entendemos que la Economía Circular de los Plásticos se posiciona como una solución sostenible que genera beneficios ambientales, económicos y sociales», indica Fernanda Valdivieso, directora del Pacto Chileno de los Plásticos, Circula el Plástico. Algunas acciones que se pueden ir incorporando diariamente tanto en el hogar como en el trabajo van en la misma dirección de transformar nuestro estilo de vida en uno que tenga al medio ambiente como prioridad.

Tanto los plásticos como los textiles, el aceite, vidrios, latas y muchas otras cosas son contaminantes y debemos tomar decisiones a diario sobre qué hacer con estos materiales. «Reflexionar sobre nuestras prácticas y hábitos de consumo; reducir el uso de plásticos desechables de un solo uso tales como: bombillas desechables, platos, cubiertos, vasos desechables; rediseñar, pensando en desarrollar productos que permanezcan en uso la mayor cantidad de tiempo posible, volviendo al ciclo o sistema una y otra vez; antes de comprar un producto indagar si existe un servicio que permita reutilizar el envase, por ejemplo: productos a granel, detergentes con recarga, etc; antes de dar de baja un producto porque no funciona, ver si es posible repararlo, o solo reemplazar aquellos componentes que estén desgastados o rotos; a la hora de comprar productos, preferir aquellos formatos que conlleven un menor uso de plástico y sean reciclables; recuperar materiales usados para volverlos a emplear en la producción de nuevos productos e introducirlos nuevamente en la cadena de consumo», explica la experta.

Programa

Para luchar contra el cambio climático y la contaminación ambiental, existen diferentes programas e iniciativas que se están llevando a cabo. «El Pacto Chileno de los Plásticos (PCP) es una iniciativa liderada por Fundación Chile y el Ministerio de Medio Ambiente, que tiene como objetivo repensar la forma en que producimos, usamos y disponemos los plásticos, para asegurarnos que el material se mantenga circulando en el sistema y no contamine el medio ambiente», señala Valdivieso. Todas las personas, empresas y organizaciones, su ámbito de acción, pueden ser un aporte para reducir los desechos, combatir el cambio climático y ayudar a forjar un mejor lugar, donde el ser humano respete y cuide el ecosistema, un hogar donde seguir viviendo.